No cabe duda de que la obesidad es un riesgo para la salud de la persona que la padece. La grasa corporal acumulada dificulta el correcto funcionamiento de los órganos internos de una persona. Además de la propia obesidad, algunos factores no modificables como la edad, raza o antecedentes familiares contribuyen a aumentar las posibilidades de presentar una enfermedad o problema de salud relacionadas con la obesidad, como:
- Glucosa alta en sangre o diabetes.
- Presión arterial alta o hipertensión.
- Cardiopatías coronarias, insuficiencia cardiaca y accidentes cerebrovasculares.
- Nivel de colesterol y triglicéridos en sangre alto.
- Problemas óseos, articulares u osteoartritis.
- Apnea del sueño, provocando fatiga, somnolencia diurna y falta de atención.
- Cálculos biliares y problemas del hígado.
En función de la grasa corporal, podemos definir como personas obesas a aquellos que presentan niveles de grasa corporal por encima de los valores normales, que son del 10 al 20% de grasa corporal respecto al peso total en los hombres adultos y del 20 al 30% en las mujeres adultas.
Tipos de obesidad según el IMC
El Indice de Masa Corporal (IMC) se usa como medida del nivel de grasa corporal y se calcula según esta fórmula:
IMC = peso/estatura² , medida en Kg/m².
Los grados de obesidad se clasifican de este modo:
- Normopeso, si el IMC es de 18,5-24,9
- Sobrepeso (no obeso), si el IMC es de 25 a 29,9
- Obesidad grado 1 (de bajo riesgo), si el IMC es de 30 a 34,9
- Obesidad grado 2 (riesgo moderado), si el IMC es de 35 a 39,9
- Obesidad grado 3 (de alto riesgo, obesidad mórbida), si el IMC es igual o mayor a 40
- Obesidad grado 4 (obesidad extrema), si el IMC es igual o mayor a 50
En la población infantil o juvenil, se suele aplicar un reductor del 85-97% del IMC para tener en cuenta el factor edad y sexo.
Tipos de obesidad según la distribución
de la grasa
- Obesidad central, abdominal o androide (forma de manzana)
- Obesidad periférica o finoide (forma de pera)
- Obesidad homogénea
Tipos de obesidad según la causa
- Obesidad genética
- Obesidad dietética
- obesidad infantil
- Obesidad por desajustes del sistema de control de peso corporal
- Obesidad por defecto fermogénico
- Obesidad de tipo nervioso
- Obesidad por enfermedades endocrinas
- Obesidad por medicamentos
- Obesidad cromosómica
Tratamientos contra la obesidad
Hay muchos factores relacionados con el estilo de vida, como la alimentación, ejercicio físico y otros hábitos de vida saludable, que contribuirán a perder peso y reducir el riesgo a padecer enfermedades relacionadas con la obesidad. La mejor forma de tratar la obesidad es identificando en edad temprana (20-25 años) a aquellas personas candidatas a padecer sobrepeso, para así prevenirlo mediante un tratamiento a largo plazo enfocado a la modificación de hábitos de vida, ejercicio físico y alimentación.